Concreto armado

Concreto armado: Características, Usos, Tipos

Una de las propiedades más sorprendentes del hormigón es su capacidad para pasar de esta líquido a sólido. Y es que esta mezcla se puede volver tan dura como una roca utilizando tan solo agua, áridos y cemento. Esto hace que sea los cimientos de la civilización pues prácticamente está presente en todas las construcciones modernas.

A pesar de ser tan duro, hay algunas veces que el concreto requiere de una dosis extra de fuerza y de resistencia. Hoy te hablaremos sobre el concreto armado, la versión más sólida y dura del concreto la cual es de las más utilizadas.

¿Qué es el concreto armado?

Como su nombre lo indica, el concreto armado es un concreto reforzado con una armadura interior. Es decir, es un concreto que dentro lleva un material adicional para hacerlo mucho más duro y resistente. Recibe el nombre de concreto armado debido a que el refuerzo viene en forma de armadura.

La forma más común de este concreto es la reforzada por acero. Se toman barras o varillas de acero y se unen para crear la armadura interior. Posteriormente se vierte el concreto creando así una unión sólida de materiales la cual aporta mayor resistencia.

Esta forma de hormigón es quizás, la forma más utilizada en la actualidad. Prácticamente está presente tanto en simples soleras y caminos como en construcciones estructurales. Los cimientos de tu casa o las columnas del puente que recorres todos los días utilizan este concreto. Incluso esculturas o fuentes usan refuerzos armados en su interior.

Características del concreto armado

  1. Acero interior o fibras: La primera característica del concreto armado son los tipos de materiales usados para reforzarlo. Si bien casi siempre es acero en barras, también se usa malla de acero y fibras para esta tarea.
  2. Propiedades mejoradas: Gracias al uso de refuerzos interiores el hormigón mejora sus propiedades sustancialmente. Se vuelve más dúctil y más resistente a distintos esfuerzos, además, soporta mejor el movimiento volviéndose ligeramente más flexible.
  3. Mayor resistencia y durabilidad: Los refuerzos de acero y fibras aportan mucha mayor resistencia al hormigón. Estos lo hacen más sólido por lo que soporta mejor las cargas y al compresión sin presentar grietas o daños. También mejoran su capacidad para tolerar vibraciones y esfuerzos como lo son los de tracción. Incluso toleran las fuerzas de movimientos que podrían quebrarlo.
  4. Adaptable y versátil: Otra de las grandes ventajas del concreto armado es que se adapta a distintas obras. Puedes utilizar en cimientos para darles mayor solidez o en elementos estructurales como columnas. De igual forma, es útil en cuanto a la colocación de simples soleras y pavimientos se refiere.
  5. Construcciones de gran volumen: De igual forma, este tipo de concreto se adapta bien a grandes construcciones. De hecho, su uso es frecuente en este tipo de obras civiles por su gran resistencia. Puedes colocar grandes volúmenes de concreto armado y este no perderá su solidez ni se agrietará por el peso o tamaño.
  6. Económico y simple: Contrario a lo que podrías pensar, este concreto es relativamente barato, por algo resulta tan común en las construcciones. Si bien el precio del acero algunas veces puede ser elevado, este se compensa con lo económico del concreto. Además, a largo plazo tiene un mantenimiento menor lo que reduce sus costos.
usos Concreto armado

¿Cuáles son los Principales utilidades?

Gracias a la resistencia y fuerza que aportan los refuerzos, los usos de este concreto armado son muchos. Podemos encontrarlo, por ejemplo, en los elementos estructurales de construcciones. Los cimientos, columnas y vigas, así como muros de carga lo usan por su gran resistencia.

Otro de los usos que podemos encontrar es la construcción de soleras y de pisos, así como losas. Tanto los pisos como los techos usan este tipo de hormigón por aportar resistencia. Incluso en elementos decorativos se puede añadir una jaula interna armada de malla para mayor solidez.

Hablando de obras, el concreto armado está presente en interiores y exteriores. En interiores, por ejemplo, se usa en muros de carga generalmente. También es común en los techos o pisos por la resistencia a la tracción que aporta. De igual forma, elementos estructurales internos también lo utilizan en su montaje.

Por otro lado, las grandes obras civiles son de las más beneficiadas con este tipo de concreto. Esto debido a que el concreto armado aporta mucha mayor solidez y resistencia a las obras. Desde túneles y puentes pasando por distribuidores viales o grandes estructuras utilizan este tipo de concreto.

Tipos de concreto armado

Concreto armado con barras de acero

Este es el tipo más común de concreto armado y uno de los más resistentes. Como su nombre lo indica, se hace a partir de barras de acero. Las también llamadas varillas se unen para formar una estructura o jaula interior.

Dicha estructura se monta en el lugar donde se construirá el elemento y se vacía concreto sobre de ella. De esta forma, el hormigón la cubre en su totalidad dejándola al interior del mismo. El núcleo de la estructura es lo que hará que el hormigón resulte mucho más sólido y duradero.

El uso de este tipo de concreto se utiliza principalmente en obras con mayor exigencia de cargas. Por ejemplo, elementos estructurales como cimientos, losas, columnas y vigas lo utilizan ampliamente. Desde construcciones residenciales compactas hasta grandes edificios u obra civil de infraestructura utilizan este tipo de hormigón.

Concreto armado con malla electrosoldada

A diferencia de la opción anterior, el concreto armado no utiliza barras de acero sino malla. Dicha malla se fabrica a partir de alambre de acero el cual se une hasta forma la malla mediante soldadura. La electrosoldadura permite que la malla sea mucho más resistente y sólida.

El uso de la malla electrosoldada ofrece mayor flexibilidad en el hormigón. Esto hace que sea mucho más resistente a los esfuerzos y las cargas, por ejemplo, a la tracción. La malla electrosoldada resulta ser mucho más ligera que las barras de acero lo que lo hace más ligero.

Por lo general, este tipo de concreto se utiliza cuando lo que se busca es un hormigón resistente, pero ligero. Es por eso que la malla no es común en elementos estructurales. Normalmente se usa en pavimentos o en caminos para hacerlos más resistentes, pero no tan pesados.

Concreto armado con fibras

Por último, tenemos al concreto que utiliza fibras para armarlo y mejorar su resistencia. Aquí se pueden usar diferentes tipos de fibras como de vidrio, carbono, plástico y de metal. Dichas fibras se caracterizan por ser fibras de distintos tamaños y de formas discontinuas.

Aquí, en lugar de unirse por medio de jaulas, lo que se hace es mezclar las fibras con el hormigón. Dependiendo del grado en el que las fibras se mezclan será la resistencia y calidad del mismo. Los beneficios que ofrece el concreto con fibras son muy variadas.

Este hormigón se vuelve mucho más flexible y también, mucho más homogéneo. Al mejorar la consistencia el hormigón se une y se evita fisuras. Otra gran ventaja es que este concreto resulta mucho más duradero para los caminos. La pavimentación resulta ser mucho más duradera gracias al uso de fibras mezclas con un buen concreto.

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