Considerado como la base de la civilización moderna, el concreto es el material más usado actualmente. Conformado por arena, cemento, agua y árido, el hormigón se ha vuelto tan popular por sus increíbles propiedades. Sólido y resistente, tiene la capacidad de soportar el peso de estructuras y edificios.
A su vez, el hormigón necesita de algunos refuerzos para ser aún mucho más resistente y duradero. Es por eso que aquí nos dimos a la tarea de contarte todo lo que debes saber sobre este hormigón. Así, entenderás cómo es que funciona el concreto reforzado y todos los beneficios que tiene.
¿Qué es el concreto reforzado?
Como su mismo nombre lo indica, el concreto reforzado es un concreto que incluye materiales adicionales para hacerlo resistente. Esto con el objetivo de hacer que las propiedades del hormigón se mejoren. Y es que, a pesar de ser sólido, el hormigón también tiene debilidades.
Al añadir materiales de refuerzo el hormigón no solo se hace más sólido, también más resistente. Mejora propiedades como su flexibilidad y su capacidad para soportar la compresión o tracción. Esto es fundamental para garantizar la resistencia y la durabilidad de las estructuras y de grandes construcciones.
El tipo de refuerzo dependerá mucho del tipo de hormigón deseado. Lo más común es utilizar acero de refuerzo en forma de barras o de armaduras. De igual forma, dependiendo de las características y necesidades de la obra será el plan a seguir. Esto debido a que existen distintas clases de refuerzos.
Características del concreto reforzado
- Resistencia: Lo primero que encontramos es que el refuerzo hace que el hormigón se vuelva más resistente. No solo mejora su capacidad para soportar peso, también diferentes tipos de esfuerzos. Esto lo hace más durable.
- Mejora de sus propiedades: Gracias al uso de acero u otro refuerzo, se mejoran las propiedades del hormigón. Por ejemplo, se puede hacer mucho más dúctil y también, mejora la tracción. El hormigón, también se hace más flexible y tolera mejor los movimientos. Esto tan solo añadiendo materiales de refuerzo.
- Elementos de gran volumen: Otra de las grandes ventajas es que este tipo de hormigón permite crear estructuras de gran volumen. No solo mejora sus propiedades y soporta mejor las fuerzas, también permite grandes volúmenes constructivos. Por eso es que este concreto reforzado es tan usado en grandes obras civiles como puentes o edificios.
- Compatibilidad: El acero utilizado en la construcción de concreto reforzado es muy compatible con el hormigón mismo. Por sus características físicas, ambos materiales se complementan a la perfección por adherencia fisioquímica. Además, al contraerse y fraguarse se logra que el acero se adhiera mejor al hormigón. Esto hace que sea mucho más duro.
- Distintos tipos de refuerzo: Si bien el acero es el material más usado en refuerzos, no es el único. También se puede usar malla especial para reforzar en lugar de barras. El uso de fibras es otro de los materiales utilizados para reforzar el concreto y darle mejores propiedades.
- Costo: Por último, debes de saber que el hormigón reforzado es de los materiales más accesibles en construcción. Esto debido a que tanto el concreto como el acero utilizados son materiales relativamente comunes y abundantes. Esto ayuda a que utilizar este tipo de material sea accesible para cualquier tipo de construcción.

¿Cuáles son los Principales utilidades?
Una de las ventajas que ofrece el concreto reforzado es su versatilidad. Este tipo de hormigón se adapta mejor a diferentes construcciones tanto pequeñas como grandes. También destaca por utilizarse tanto en usos estructurales como en acabados relativamente estéticos o de menor exigencia en carga.
Por ejemplo, el concreto armado va muy bien con la construcción de obras de ingeniería civil. Las columnas de puentes, así como las vigas y trabes suelen utilizar este tipo de material en su fabricación. También se utiliza para la cimentación de obras como puentes por las propiedades que aporta el acero.
En cuanto a construcciones residenciales, este tipo de concreto va muy bien en las cimentaciones. Los muros de carga y columnas también utilizan acero para reforzarlas y hacerlas mucho más resistentes. En los pisos y colados de techos también se suele añadir refuerzos siendo la malla uno de los principales.
Otro de los usos que encontramos para este concreto está en la pavimentación de suelos y montajes de soleras. Al colocarse fibras o acero, el hormigón se vuelve mucho más flexible y soporta mejor las fuerzas. La tracción, por ejemplo, produce daños y fisuras por la fuerza de tracción, el acero ayuda a solucionarlo.
Tipos de concreto reforzado
Concreto reforzado con barras de acero
El tipo de concreto reforzado más utilizado hoy en día es el que se refuerza con acero, acero en barras. Conocido también como varillas, las barras de acero son muy resistentes, duraderas y de gran solidez.
El diámetro o calibre de las barras de acero dependerá del tipo de carga que soportará la estructura. Entre más gruesa sea la barra, mayor será la capacidad de soportar cargas y esfuerzos. Si miras las estructuras de puentes o cimentaciones, las barras de acero suelen ser más gruesas.
A su vez, las barras de acero a utilizar suelen ser barras de acero estructural el cual es más duro. Para fabricarse, este acero pasa por diferentes procesos que ayudan a reforzarlo y hacerlo más sólido. La mayoría de barras de acero en el mercado han sufrido tratamientos para ser más resistentes.
Concreto reforzado con malla electrosoldada
La malla electrosoldada es un tipo de malla de acero la cual se ensambla a partir de alambres gruesos. Para unir cada alambre estos pasan por un proceso de soldado con electricidad. Dicho proceso es conocido como electrosoldado el cual aporta aún más resistencia.
La malla de electrosoldado, a diferencia del acero, no tiene un uso tan estructural pues es menos grueso. Es por eso que la malla electrosoldado se utiliza principalmente en la colocación de soleras o pavimentos. El acero en forma de malla no solo aporta resistencia, también le da flexibilidad al hormigón.
Al igual que pasa con las barras de acero, el grosor varía dependiendo del tipo de malla a usar. Por ejemplo, tenemos mallas de 5 mm y de 2 mm las cuales cambian según el uso. El pavimento peatonal usa mallas más delgadas que las soleras o suelos para autos.
Concreto reforzado con fibras
Tanto el concreto reforzado con barras de acero como con malla usan una estructura de jaula interna. En cambio, el concreto reforzado con fibras no utiliza una jaula interna en su fabricación. Aquí, el refuerzo proviene de la mezcla de las fibras con el hormigón.
Actualmente se utilizan diferentes tipos de fibras como refuerzo para el hormigón. Por ejemplo, la fibra de vidrio es de las fibras más usadas. La fibra de acero es otra de las fibras utilizadas. De igual forma, el polipropileno, fibra de carbono y aramida son utilizadas como refuerzo para el hormigón.
La principal razón por la cual se usa estas fibras está en la aglomeración que ofrece. Y es que estas fibras discontinuas ayudan a que la mezcla sea más homogénea. Al ser más compacta, el hormigón no se fisura ni se rompe. También ayuda a aumentar la solidez de la mezcla.