El cemento es uno de los materiales más conocidos y utilizados en la construcción, sus usos son variados y van desde arreglos básicos a una estructura hasta obras de gran envergadura. Desde que se inventó el cemento el rubro de la construcción ha evolucionado vertiginosamente, tanto que hoy en día lo vemos en casi todo lo que nos rodea.
A lo largo de este tiempo han surgido diferentes tipos de este material. El cemento se usa para diferentes objetivos como construcción de viviendas, edificios, túneles, muelles, puentes, pero además para la elaboración de bloques, ladrillos, adoquines, paredes y pisos, entre otros.
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¿Qué es el cemento?
La palabra cemento viene de la palabra en latín caementum que significa argamasa. Los romanos lo utilizaban como material adhesivo en sus construcciones, de las cuales existen aún hoy en día.
Este es un material que se endurece a través de un proceso químico una vez que se mezcla con el agua en un proceso conocido como fraguado, lo que produce una serie de propiedades fisicoquímicas y mecánicas del hormigón. El cemento constituye entre el 10 o 20% de este material.
Para lograr la formación del hormigón se necesitan otros agregados pétreos y arena, los cuales se unen en una sola mezcla a través del uso del cemento, esta combinación de materiales es lo que le da al concreto esta gran resistencia.
Entre los tipos de cementos más utilizados se encuentra el Portland o cemento gris como también se conoce. Es el que se usa para construcciones como edificios, puentes, presas, losas, suelos, entre otros.
¿Cuáles son los componentes del cemento?
Dependiendo del qué uso se le dará al cemento serán los componentes que lo conformen, sin embargo, a continuación estaremos describiendo los ingredientes del cemento Portland debido a que es uno de los más versátiles y utilizados en obras de construcción.
Desde el punto de vista químico el cemento está conformado por los siguientes óxidos:
- Sílice: Este tipo de óxido está presente en la mezcla en una proporción de 19 a 25% del cemento.
- Óxido de Hierro: La proporción de este componente tiene una variación de entre 2,5 a 4,5%.
- Cal: Es el que tiene mayor presencia en los componentes del cemento ya que está entre un 62 y 65%.
- Alúmina: La proporción de este componente tiene una variación de entre 3,5 a 8%.
- Yeso: Está en un 1,5 y 4,5%.
- Magnesia: Su proporción está entre un 0,5 y 5%.
- Álcalis: La cantidad está entre los 0,2 y 1,2%.
Como ya hemos dicho, de acuerdo al tipo de cemento variará en componentes y proporciones.
Características del cemento
El cemento tiene ciertas características fisicoquímicas específicas, entre ellas tenemos:
- Finura: Mientras más fino sea el cemento será más rápida la velocidad de hidratación y el desarrollo de resistencia del hormigón.
- Consistencia: Se trata de las proporciones equilibradas entre agua, materiales y cemento, así como el tiempo de fraguado.
- Tiempo de fraguado: Al reaccionar químicamente con el agua, se forma una pasta de hormigón con cierta plasticidad que se irá endureciendo gradualmente.
- Resistencia mecánica: El cemento es el que le provee al hormigón la resistencia mecánica, siempre y cuando la mezcla con los otros materiales tengan la proporción correcta.
- Calor de hidratación: Es lo que permite equilibrar la temperatura máxima que desarrollará el hormigón aún fresco.
¿Cuáles son los principales usos del cemento?
Como ya lo hemos mencionado, desde que se comenzó a usar el cemento, éste ha sido el material por excelencia en cualquier construcción. Pero para conseguir el mejor de los resultados es poder saber cuál es el tipo de cemento adecuado para cada obra específica.
Cada uno de los tipos de cemento tiene sus usos específicos, pero uno de los más usados por los buenos resultados que ofrece es el cemento Portland. Este se compone por Clinker pulverizado y sulfato de calcio y gracias a sus propiedades consigue una consistencia homogénea muy rápidamente.
Lo importante es saber que dependiendo del tipo de construcción o trabajo será el cemento a usar, debe ser el que sea más compatible. Desde la construcción de aceras, pisos, muros, alicatados, construcción de canales y tuberías de agua entre muchos otros.
En el caso del cemento Portland, es el que más se utiliza en la construcción de estructuras de secado rápido como encofrados, concreto armado y fabricación de bloques, adoquines y ladrillos o cualquier otro trabajo de albañilería que requiera de secado rápido.
Esta es la razón por lo cual es el más buscado en las construcciones, es tan versátil que se utiliza en casi todo, pero por supuesto que hay casos más puntuales en los que se aconseja el uso de otro tipo de cemento para lograr en efecto adecuado, como en el caso de la colocación de cerámicos.
Entre la gran cantidad de usos que se le dan al cemento tenemos la construcción o refacción de estructuras. Entre algunas de las aplicaciones tenemos:
- Uso del cemento en la construcción de pisos. En este caso existe una gran cantidad de opciones para cualquier tipo de diseño, entre las que se destacan los pisos impresos, pisos lisos, entre otros.
- Para la elaboración de concreto poroso o pobre.
- Para elaborar losas de concreto.
- Para el alicatado y colocación de baldosas tanto en pisos como en paredes.
- Elaboración de postes, aceras, mesas, fuentes y bancos de cemento.
- Construcción de escaleras.
- Gravas de cemento.
- En la construcción de obras públicas con hormigón pretensado.
- Elaboración de lavaderos de cemento.
Diferentes tipos de cemento
El cemento es un material que tiene una composición química variada, según su origen se puede clasificar en cementos arcillosos, que se componen de arcillas y piedras calizas y los puzolánicos que están compuestos por cenizas volcánicas o puzolanas. A continuación describimos los diferentes tipos de cemento que existen:
Cemento Portland o cemento gris
Podríamos decir que este es el cemento más usado en cualquier tipo de construcción y es la base para casi cualquier trabajo que van desde la elaboración del hormigón hasta preparación de morteros para la construcción de paredes, encofrados y restauraciones.
La presentación de este cemento es en un polvo bastante fino que tiene la capacidad de reacción rápida al contacto con el agua y es muy adhesivo lo que le brinda bastante resistencia al hormigón elaborados con este cemento.
Cemento blanco
Es un tipo de cemento Portland, cuya única diferencia es que no lleva en su composición el óxido de hierro, lo que hace que su apariencia sea de un gris más claro casi blanco. Este no es tan resistente como el cemento gris por lo que se utiliza como aglomerante de otro tipo de trabajos más delicados, como los morteros de cal.
Cemento de fraguado rápido
Este es otra variedad del cemento gris, que es especialmente recomendado para construcción y reparación de tuberías o canales de agua, debido a que su composición le brinda una capacidad de fraguado y endurecimiento más rápido. Esto permite su uso en superficies o zonas húmedas o cuando se necesita un endurecimiento rápido.
Cemento cola
Este tipo de cemento se usa como componente de morteros y hormigones, pero también para colocar baldosas y azulejos en interiores y exteriores. Este cemento se clasifica según las necesidades de la obra y las características de los cerámicos.
- Tipo C1: este es el usado en interiores y es de sacado muy rápido. No tiene una gran resistencia por lo que su uso se limita a solar y alicatar en el interior de la casa.
- Tipo C2: Es un poco más resistente y se utiliza para clocar piezas de mayor tamaño ya sea para paredes o pisos y en interiores como en exteriores. Seca con más lentitud.
- Flexible: Este tipo de cemento se aconseja para aquellas estructuras que pueden sufrir de movimientos o episodios de contracción o dilatación.
- Especial yeso: Este tipo de cemento tiene buena adherencia y es conveniente usarlo para colocar baldosas en superficies de yeso o escayola.
- Especial tabiquería: Este es el que se usa para revestir paneles de cartón piedra.
Usos del cemento en la construcción industrial
El cemento se usa en casi cualquier construcción, así es como lo vemos en soleras, aceras, muros, pisos, elaboración de ladrillos, entre muchos otros. Pero sin duda, uno de sus usos más importantes es la generación del concreto armado, el cual es un tipo de hormigón reforzado con mallas y fibras sean sintéticas o metálicas.
Este tipo de hormigón es vital para construir cimientos, pilares, vigas y especialmente losas de pavimentos, que son tratados con diferentes acabados para optimizar su resultado, sobre todo en complejos industriales donde se utiliza maquinaria pesada.
Esto lo que nos muestra es que el uso del cemento por sí solo, no se aconseja para construir pisos, ya que su dureza no es tan alta para soportar ciertas cargas o desgaste acelerado de la superficie. En este caso, se utiliza el hormigón que si puede soportar la tracción y grandes cargas de peso.
El hormigón utilizado para la construcción de losas, generalmente reciben diferentes tratamientos que sellan y endurecen la superficie y dan como resultado un tipo de hormigón pulido que está mucho más protegido y simplifica en gran medida su mantenimiento.